Los otros engaños de Astut Mas

«Tenemos que engañar al Estado»: eso dijo el presidente de la Generalitat (representante del propio Estado en Cataluña), Artur “astut” Mas, a los líderes de los partidos políticos que apoyan la Consulta del 9 de noviembre; según publicaba El Periódico de Cataluña ayer domingo, 26 de octubre.

Sin embargo, lo relevante no sería –en mi opinión– la voluntad de engaño de Mas hacia el Estado, sino los otros engaños de Mas:

En primer lugar, el engaño de Mas al público independentista: prometer y convocar una Consulta oficial el próximo 9N que sabía desde el primer momento que no se celebraría. Así, uno de los consejeros de Mas habría afirmado, según Salvador Sostres:

Nunca tuvimos intención de celebrarla [la Consulta oficial del 9N] y era sólo un artefacto para que España quedara mal y para reunir al mayor número de catalanes alrededor de una idea simple y a la que es muy difícil negarse: queremos votar.

Y otro de sus hombres de máxima confianza explicaría:

Nuestro objetivo final ha sido siempre tensar la cuerda al máximo pero sin romperla, y paliar con la lista única el desgaste que hemos sufrido por los recortes y por los casos de corrupción.

En segundo lugar, el engaño de Mas a ERC: proponer elecciones anticipadas plebiscitarias con una lista única encabezada por Mas (“la llista del President“, la “llista Mas”) que incluiría a ERC, con la intención de salvar su propio pellejo político y, al mismo tiempo, desactivar a la pujante ERC. Doble engaño aquí, porque Mas –muy astuto él– sabía de antemano que ERC no caería en la trampa.

En tercer lugar, el engaño de Mas a ANC y Òmnium Cultural: prometer elecciones anticipadas, sin determinar la fecha, para que dichas entidades sociales participen en el “teatro” del 9N, después de las declaraciones de las nenas en el acto central de campaña de Ara és l’hora en Plaza Cataluña el pasado 19 de octubre. Engaño, porque Mas quiere (y puede) agotar la legislatura, a la espera de lo que suceda en las próximas municipales y –sobre todo– generales, y ante el temor de la irrupción de Podemos en unas eventuales elecciones catalanas anticipadas, que podía acabar con un tripartit ERC-Podemos-CUP.

Zanahorias para los suyos: al final, ni Consulta oficial el 9N, ni lista única, ni elecciones anticipadas plebiscitarias, ni nada de nada.

En definitiva: lo relevante no es el engaño de Mas al Estado, sino los otros engaños: a los catalanes independentistas, ERC, ANC, Òmnium Cultural; es decir, a su propia gente.

L’Astut Mas: Catalans! us fotré una trola així de grosa.

.

.